¿Quién no ha jugado alguna vez a ser formulador de pequeño? Nos encantaba mezclar cosas y ver qué pasaba. En casa mi hermana pequeña disfrutaba cogiendo mil plantas del jardín y mezclándolas soñando crear el perfume perfecto. Ya no sé si vendrá influenciado por que mi padre al ser farmacéutico, pero al final todos hemos llevado en el interior a un científico loco curioseando y mezclando todas las bebidas de las fiestas de cumpleaños para ver como sabía eso.
Hoy con este artículo te vamos a llevar a esos recuerdos, a volver a formular y sentirte alquimista, pero con seguridad.
Formular en casa tus propias cremas está de moda a pesar de poder llegar a ser perjudicial para tu salud, por eso nos es muy importante explicarte esta receta siguiendo unos principios básicos.
Al crear tu propio aftersun su validez de caducidad se minimiza al no presentar conservantes que estabilicen la formula, siendo menor a 3 meses. Y sí, la fecha de caducidad es muy importante porque queremos ponernos la bata de químico especialista en plantas medicinales, pero no queremos que nuestra piel se convierta en la de un elefante toda inflamada y con escamas por una posible infección secundaria. No de eso nada.
Se llama aftersun a aquella crema o loción indicada para aplicar después de la exposición solar con la capacidad de calmar y recuperar la piel tras ese daño solar.
Por ello vamos a formular una sinergia de aceites esenciales para obtener diferentes propiedades calmantes y cicatrizantes que se multipliquen.
Pues vamos al lio, si ya te he convencido ponte tus guantes de laboratorio y ¡A formular!
Para la elaboración necesitaremos seguir esta receta:
- Aceite vegetal de caléndula -50 gotas
- Aceite esencial de Menta piperita – 10 gotas
- Aceite esencial de Espliego macho -35 gotas
- Gel de aloe vera – Hasta rellenar
- FRASCO DOSIFICADOR 60ML

Hablemos de las propiedades de cada aceite antes de meternos en la masa, vamos a comentar las propiedades de cada uno de ellos:
Los aceites esenciales deben de vehiculizarse por medio de un aceite vegetal o geles para evitar posibles irritaciones del contacto directo de los aceites esenciales. Es decir, los aceites esenciales son la mamá que acompaña a los aceites esenciales para que se porten bien.
El aceite esencial de caléndula presenta propiedades antiinflamatorias, antialérgicas y antipruriginosas siendo primordial para calmar la piel tras el daño solar.
El aceite esencial de espliego macho es el botiquín de casa, alivia de inmediato ante quemaduras y picaduras siendo un muy potente antipruriginoso y cicatrizante.
El aceite esencial de menta piperíta presenta propiedades calmantes.
Todos estos aceites son formulados en gel de aloe vera que actúa como base de la formula, es el “colchón” para que todos los aceites esenciales se encuentren cómodos.
Manos a la obra y a seguir los pasos para tener tu aftersun ideal.
Comenzamos añadiendo en el tarro dosificador gel de aloe vera hasta la mitad. A continuación iremos dosificando los aceites esenciales y vegetales, 35 gotas de espliego macho, 10 gotas de menta piperita y 50 gotas de caléndula.
Se aconseja inclinar el frasco a 45º para facilitar la caída de las gotas en el recipiente madre.
Una vez finalizado, rellenamos el tarro con aloe vera. Sellamos , agitamos y listo.


